La capacidad de persuasión
Sin salirme del post de seisdeagosto hay un párrafo clarificador. La capacidad de persuasión tan potente que puede tener un simple literal en tu interfaz es muchas veces pasada por alto. Un frase redactada de forma diferente puede multiplicar tus objetivos. Piénsate una y mil veces el copy que escoges para tu interfaz, desde las primeras propuestas. El copy también es interfaz.
Casi coincidiendo con el post me encontré un mensaje, una inquietante alerta de una red social más que conocida, hasta hay películas que hablan de cómo se creó. Y que, sin embargo en este caso no hace una correcta gestión del error.
Y un poquito más allá
Los mensajes de error son aún más difíciles. Algunos sitios ni siquiera se molestan en personalizar estos desinformados mensajes. Un buen mensaje de error es aquel que indica lo que salió mal, por qué ocurrió y lo que hay que hacer para solucionarlo. Lo mejor es hacer que el sistema no provoque errores pero, a veces, no es tan fácil evitar que dichos errores se produzcan. En este caso hay que prestar la máxima atención a los mensajes de error. A cómo se muestran. A que opciones se muestran al usuario y con qué contenido.
Cuando hablamos de experiencia de usuario de un sitio web hablamos de todo esto, nos referimos a intentar que el usuario consiga una experiencia de usuario óptima. En cuestión de un segundo cualquier acción o error humano o del sistema nos lanza un desconcertante mensaje de error.
Pues bien los mensajes de error son uno de los puntos críticos que se suelen tratar “de pasada” y en las últimas etapas del proceso. Casi siempre se da prioridad a otros conceptos, dejando en esta última etapa la definición y resolución de los errores que se puedan producir.
El proceso no es fácil
Hay que empezar planificando e identificando dónde puede fallar un proceso, por qué puede fallar. Y, después… adelantarse al fallo, intentar prevenir el error y, por descontado, definir un texto adecuado, comprensible, para a continuación dar una salida para cada una de las posibles variantes.
Y, sobre todo, que cualquier persona entienda qué es lo que ha ocurrido. Entienda cómo puede solucionarlo. Y no, como suele pasar, que sólo de información al equipo de programadores de la aplicación.
Si somos capaces de conseguir que un usuario se sienta cómodo ante un mensaje de error, que comprenda qué ha ocurrido y cómo continuar con su tarea después de mostrar un error, habremos conseguido aumentar la afinidad de esa persona con el sitio web. Hablamos siempre de personas y no de tecnologías.
Historia de un letrero
Continuando con el post de Juan os dejo un vídeo al que se hace referencia que muestra como un texto puede cambiar todo el sentido de una acción.
mas…
- ¿Desea continuar o esperar a la impresora?, aquí en inquiettudes
- Gestión y prevención de errores en interfaces de usuario, de Ivan Marnet
- Contra Lorem Ipsum, de Jesús Encinar
Publicado mas o menos el 16 de diciembre de 2010 a las 3:02 am por César García Gascón, archivado en las categorías Diseño de interacción, Usabilidad y etiquetado cómo Experiencia de usuario, interacción, interfaces, Usabilidad. Siéntete libre de comentar un poco más abajo si quieres.